Wyndham Clark supo controlar la presión de llegar al domingo como líder del US Open. Se repuso a los errores que cometió durante la ronda y con maestría, buen juego sobre el green y la pizca necesaria de suerte. Se llevó el primer major de su carrera para celebrarlo con una emotiva dedicatoria a su mamá, fallecida hace algún tiempo y quien siempre lo motivó en su carrera.

Sin embargo, el arma secreta de este título no fue la suerte, tampoco sus golpes desde el tee, los cuales no se pueden ignorar. Lo que le permitió a Wyndham Clark quedarse con este título fue su estupendo juego sobre green, que estuvo, en parte, motivado por un cambio cercano al torneo. Esto tuvo mucho que ver uno de sus principales competidores y grandes amigos, Rickie Fowler.

La historia es así: justo antes del Arnold Palmer Invitational, torneo del PGA Tour, Rickie Fowler y su amigo Wyndham Clark estaban jugando en el Medalist, un campo de la Florida, del que es socio Clark. En medio de la ronda y teniendo en cuenta lo mal que estaba jugando sobre green, el actual campeón del US Open eligió probar el putter de Rickie. Quien vio embocar cada putt de su ronda de práctica, y al tenerlo en las manos supo que eso era lo que necesitaba.

Teniendo esto en cuenta, Clark llamó al personal de Odyssey y fue claro con su pedido. “Me pueden hacer un putt como el de Rickie Fowler”, aseguró. A la pregunta sobre las especificidades del mismo, su respuesta fue la misma: “Tal cual el de Rickie Fowler”.

Este Odyssey Versa Jailbird cambió totalmente el juego de Wyndham Clark. Todo parece indicar que fue la clave de su victoria en el Wells Fargo Championship, una serie de éxitos que solo evidencian la importancia de sentirse cómodo sobre el green, embocar cuando hay que hacerlo y saber no dejarla lejos en otros tantos golpes.

Para concluir, vale la pena destacar los casos de Rory McIlroy y del actual número uno del mundo, Scottie Scheffler. Uno que hace tiempo no se siente cómodo y perdió muchos golpes sobre green y el otro que, en los últimos torneos, no ha sabido definir en momentos clave cuando debe embocar. Así como en tantos otros golpes, lo del putter de Wyndham Clark y su juego, fueron clave.

El putter de Wyndham Clark es un Odyssey Jailbird Versa con un grip SuperStroke Zenergy Tour 3.0 de 17 pulgadas.

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